21.2.13

Portafolio

Puede que su portafolio estuviera lleno pero su poesía seguía inconclusa.

¡Ahí va!

¡Ahí va! lo siento explotar como nunca ¡Ahí vas! te siento reventar como siempre. Ahí vas amor, estas maldito, porque amas y no tienes retorno, reverenciando el melancólico ardor de un corazón herido, te pierdes en la ira de una noche estrellada y una cama vacía.

Vos

 Quizás porque aún te amo, no quiero sanar de ti, pues bien, te digo, está noche nada más pensaba en vos ¿qué más que hacer? vida y sueños, todo parece un juego, en el que a veces se gana, en otras nada más pierdes el turno, y esperas.
 Y sin embargo, caminante noctambula, pensaba en vos, viéndome devorado por ese mundo de fantasía, que brotada de tu imagen enceguecía mis musgosos ojos, a los que en esta noche curar tan inútil ejercicio es, ya que mis manos nada más quieren perderse en los táctiles recuerdos de una versada piel.
 Amor, ebrio está noche te pienso, mas ebrio de palabras y poesía, me quedo en vos.

Pajaritos

 Me gustaba escucharla cantar, porque tenía una voz de sollozo y nostalgia.
 Me la hubiera pasado la vida oyéndola, cantando de cosas inconexas, como deben cantar los pajaritos.

siniestras luces

Y sin embargo siniestras luces acuden, de tanto en tanto, a beber la fantasía de tus labios.

1.2.13

Es el miedo, el palpitar de mi corazón sobresaltado por las sombras nocturnas. Algo te acecha, algo está ahí a la espera, emboscando la poca cautela. Es el miedo y no sé como controlarlo.

(a veces solo falta amar)