"La lluvia cae fina, obstinada, tranquila. Y ella la escucha caer. Caer sobre los techos, caer hasta doblar los quitasoles de los pinos, y los anchos brazos de los cedros azules, caer. Caer hasta anegar tréboles, y borrar senderos, caer.
Escampa y ella escucha el nítido bemol de lata enmohecida que rítmicamente el viento arranca al molino. Y cada golpe de aspa viene a tocar una fibra especial dentro de su pecho amortajado."
La amortajada - Maria Luisa Bombal
3 comentarios :
Este tipo de escritos me dejan sin comentarios, a veces me cuesta verbalizar o expresar algunas cosas... muy bello el extracto que escogiste de Bombal.
Saludos,
cariños,
abrazos.
Estuve sentada largo rato pensando qué escribir, y sucede que leí un par de cosas, me sentí impresionada al ver como algunas personas tienen la capacidad de expresar tan bellas palabras, inventar historias, transcribirlas, imaginarlas. De verdad las admiro, admiro a las personas que tienen esa capacidad, innata o adquirida, personas que pueden crear bellos apartados en prosa o verso. Quizás sea exagerado pero me emociona, me enternece leer tales pasajes de seres anónimos que se entregan a la literatura, escribanos urbanos, escribanos de lo cotidiano, de lo imaginario, que plasman sus ideas conectándolas in/coherentemente.
Tal vez sea una de las cosas que me gustaría explorar, que sin embargo no me he dado el tiempo de hacer. Quizá simplemente, como dicen algunos, no tengo dedos para el piano. He escuchado de muchos que dicen que sienten la necesidad de escribir, que si no lo hacen se sienten mal consigo mismos, que es su vía de escape, una manera de expresarse y de exteriorizar lo que sienten. Que exquisito mundo interior, que admirable que de sus mentes y dedos fluyan las ideas que se convertirán en pequeños mundos. Creadores de universos paralelos, ¿serán como un dios? O pequeños dioses que dan vida a personajes y acciones, que se mueven en el tiempo imperecedero del libro.
No sé siquiera como terminar todo esto, ¿será pertinente acaso una frase optimista? Una frase que me impulse y anime, que me haga sentir con el poder lingüístico de crear líneas interminables de historias y cuentos. No sé como terminar, nunca lo sé, en cualquier orden de cosas me complica, empezar no, eso me es fácil, pero cuando pasa el tiempo ya se me dificulta finiquitar los asuntos, y como ahora, simplemente redundo en balbuceos y frases sin sentido. Y termino como siempre hablando o escribiendo de algo totalmente distinto a lo que había comenzado…
Esa fue mi reflexión del día de hoy... jaja ando media introspectiva ultimamente.
Espero que tú andes de lo más bien...
Y sí,
los puntos supensivos ayudan a imaginar que más puede seguir, me gustan los puntos suspensivos, me cargan los puntos finales...
Y sí,
lo que escribiste me gustó mucho
podriamos hacer algo así como "cadaveres exquisitos" jajaja
:)
cariños
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